La humanidad se está enfrentando a una situación sin precedentes. La tecnología e innovación avanzan cada día más rápido y mientras los desarrolladores prueban nuevas alternativas van dejando atrás programas funcionales en lenguajes que son cada vez menos populares.
Como desarrollador siempre está la incógnita de con que lenguaje desarrollar cierta aplicación/herramienta. Diferentes lenguajes y herramientas nos dan diferentes facilidades y “poderes” a la hora de desarrollar el software. Por ejemplo, escoger una herramienta como Angular o VueJS nos permitirá poder manejar la interfaz de usuario de manera sencilla y efectiva creando visuales muy atractivas para los clientes, estas herramientas serán suficientes si es que tenemos otro software que se encargue de las bases de datos y procesamiento lógico ¿Y si no existe nada y debo manejar también la base de datos? Entonces quizás puedas desarrollar el FrontEnd con Angular, pero crear un BackEnd con C# o quizás crear un conjunto de herramientas con NodeJS y tener FrontEnd y BackEnd juntos.
COBOL se creó en 1959. Fortran, en 1957. Delphi, mucho más moderno, es de 1995. Todos ellos fueron muy populares en su día, pero lo más importante: siguen siendo críticos en diversos escenarios hoy en día. Al igual que nosotros, los desarrolladores de hace 40 años enfrentaron las mismas incógnitas, aunque en su tiempo su elección era entre COBOL y Fortran. Esto genera que una aplicación escrita hace 40 años este escrita en una “lengua extraña” para los desarrolladores de hoy. Sin embargo, muchas empresas continúan funcionando con software escrito en lenguajes antiguos y descontinuados que necesitan soporte y hacer modificaciones a su funcionalidad, aunque no tanto como para reemplazar el software completo que sería mucho más costoso en dinero y tiempo.
Hay que considerar que una institución como un banco que dejar de funcionar por unas horas puede llevar a millones de pérdidas. Empresas con cientos de empleados necesitarían volver a capacitarlos a todos para utilizar un sistema nuevo, migrar la información del antiguo sistema al nuevo, etc. Aunque es posible, el retorno de la inversión no lo justifica.
Entonces, luego de entender dónde nos ubicamos en la historia de la programación. Nos damos cuenta que la demanda de programadores que se manejen en lenguajes poco usuales o antiguos no bajará; de hecho, podría aumentar con el paso de los años.
Como en todas las cosas la diversificación siempre es buena. ¿usas algún lenguaje de programación antiguo? Respóndeme en los comentarios.